Estado de alerta permanente

"Se espera que hasta el más humilde de los miembros del Partido sea competente,
laborioso e incluso inteligente -siempre dentro de límites reducidos, claro está-, pero siempre es preciso que sea un fanático ignorante y crédulo en el que prevalezca el miedo, el odio, la adulación y una continua sensación orgiástico de triunfo. En otras palabras, es necesario que ese hombre posea la mentalidad típica de la guerra. No importa que haya o no haya guerra y, ya que no es posible una victoria decisiva, tampoco importa si la guerra va bien o mal. Lo único preciso es que exista un estado de guerra. La desintegración de la inteligencia especial que el Partido necesita de sus miembros, y que se logra mucho mejor en una atmósfera de guerra. "

1984. Cap IX

La sensación permanente de inminente peligro es fundamental para mantener dóciles y sumisas a las masas, y para conseguir aglutinarlas en torno a su líder protector, que les librará del peligro. Sí, aunque ese lider protector sea algo como Bush.

Por eso se hacía necesario, ahora que ya están más cerca las elecciones, subir el nivel de alerta ante los indicios de un inminente ataque terrorista. Eso sí, no se indica qué indicios son esos, ni porqué ahora son más peligrosos que antes, ni de dónde provienen esos datos. Claro, todo eso es secreto, pero no es secreto el estado de alerta. No se le dice a la población cuál es el peligro, pero sí que hay peligro y mucho, peligro que pasará inmediatamente después de las elecciones, claro.

Cuanto más cerca estén las elecciones más necesario es tener a la gente asustada, para que voten por ese lider que lucha denodamente contra el terrorismo islamista de origen saudí y afgano... en Irak.

Un pueblo atemorizado reniega de cualquier cosas que signifique cambio ("Virgencica, virgencica, que me quede como estoy"), aunque ese cambio sea algo tan parecido a lo que ya tienen con el Sr. Kerry.

Y todavía tienen el morro de hablar del país de la democracia y las libertades.

Menudo camelo.